lunes, 10 de junio de 2013

Maldito

Maldito el soldado que empuña un arma contra su propio pueblo
Maldito el que la empuña contra otros
Maldito el cobarde que calla,
el que llena los bolsillos con las cenizas de los hogares ajenos
el que aparta la mirada, el que esconde la mano
tras apretar el botón.
Maldito el estúpido que rige millones de destinos, millones de almas
sin la sabiduría para hacerlo.
El que juega a la colonia de hormigas de talla humana,
con la lupa en una mano y en la otra las migajas.
Maldito por siempre, para siempre, en todos los lugares de la tierra
Maldito sea hasta el preciso momento
que nadie recuerde su nombre nunca más
que su recuerdo sea de lo que jamás
ha de volver a suceder.